Honduras, con una población de 10.4 millones, es uno de los países más desiguales de América Latina. Aunque la nación ha progresado en la reducción de la pobreza, la mitad de la población aún vive en condiciones de pobreza. La tasa de homicidios ha disminuido en los últimos años, pero sigue teniendo una de las tasas más altas del mundo. Las organizaciones que trabajan con Kenoli lo hacen en condiciones muy desafiantes, abordando los derechos humanos, el desarrollo rural holístico, el desarrollo de la temprana edad de la niñez, la seguridad y soberanía alimentaria y la capacitación técnica en comunidades/aldeas rurales.